Una de las preguntas que suelo hacer a los pacientes que refieren dolor en la ingle, la raíz del muslo y el glúteo es si se pueden poner los calcetines por sí mismos. Con frecuencia me miran sorprendidos, como si hubiera adivinado un secreto que sólo ellos conocieran; me miran con los ojos muy abiertos y responden: “hace años que me los tienen que poner; por mi mismo, no llego, imposible”.
Esa pregunta tan sencilla, ya orienta acerca del origen del dolor, y éste no es otro que la cadera, y el dolor venga relacionado con artrosis o enfermedades que provocan la deformidad de la cabeza femoral.