NADIE podría adivinar en lo que iba a acabar ese “saludable” paseo en bicicleta. En qué hora se subió el Secretario de Estado John Kerry para hacer esos kilómetros. La verdad es que el día acompañaba. Francia cerca de la frontera con Suiza, primavera, día soleado. Quiso recorrer una parte de la etapa del Tour de Francia que discurrirá por aquellos lares. Sin embargo, el heptagenario americano pierde el equilibrio y se cae. Para un ciclista más joven o más experimentado, no hubiera supuesto más allá de algunos rasguños, pero el americano posee una serie de problemas que han complicado el tropezón. Se operó hace años de una prótesis de cadera debido al deterioro articular que le limitaba sobremanera.
El destino ha hecho que la fractura ocurriera donde nadie quiere, en el fémur operado y en la zona próxima a la punta del vástago que va por dentro del fémur. No quiero ni imaginar el dolor que supuso dicha lesión. Inmediatamente fue evacuado a un hospital, estabilizado y trasladado a Boston, al Massachuset General, uno de los mejores hospitales del mundo; donde además fue intervenido de la prótesis de cadera que portaba. Fue intervenido el martes pasado, y según su cirujano, tras 4 horas de intervención, la fractura quedó resuelta y no cree que dicho contratiempo interfiera enla agenda del mandatario americano.
