Supone un lugar de encuentro donde socializar con otras personas compartiendo una afición tan saludable.
Es cada vez más habitual que las personas se quieran cuidar, la edad no es importante. Lo que más me llama la atención es la cantidad de personas que deciden hacer ejercicio bailando.
El baile les ha cambiado la vida. Practican varios días a la semana con sus profesores correspondientes, tras trabajar durante todo el día sin descanso, esperan con ganas las últimas horas del día para aprender y perfeccionar los pasos y la coordinación, y los fines de semana, ponerse de largo y disfrutar en las múltiples salas que abundan en toda la provincia. Bailar también es tremendamente popular entre nuestros mayores.
Aparte de los beneficios que ahora describiremos, bailar supone un lugar de encuentro donde socializar con otras personas compartiendo una afición tan saludable.
La generación de nuestros padres vivirá más que la de nuestros abuelos y podemos decir lo mismo de la nuestra respecto a la de ellos. La esperanza de vida en el mundo desarrollado se ha disparado. Cada vez vivimos más y quizás, también mejor. Las razones son varias:
–Avances médicos: mejores medicinas, técnicas de diagnóstico más avanzadas, despistaje de enfermedades oncológicas y campañas de detección precoz del cáncer. Aunque dicho sea de paso, la crisis ha hecho mucho daño en las prescripciones y el gasto médico, reduciéndose a niveles tercermundistas.
–Mejor alimentación: Ha mejorado la nutrición. Mayor control sobre lo que comemos.
-Mayores comodidades.
–Ejercicio y actividad física: Es el elixir de la eterna juventud. Es lo que va a añadir vida a los años en lugar de añadir años a la vida. No se trata de vivir mucho, sino de tener calidad de vida, independientemente de la edad que tengamos.
¿Cómo afecta bailar a nuestro organismo?
a) Corazón.
-Bailar hará que el corazón lata más despacio y que nos cansemos menos subiendo escaleras o caminando ya que, como cualquier músculo, se hace más grande y fuerte conforme vamos progresando en el ejercicio.
-Reducción de la tensión arterial. La mayoría de la población española adulta toma medicinas para la tensión. El endurecimiento de las arterias debido a la edad y la arterioesclerosis hace que el corazón precise bombear con más fuerza la sangre. Los vasos no son tan elásticos. Bailar ayuda a controlar dichas cifras y hace que las medicinas sean más efectivas e incluso que no tengamos que tomar ninguna.
b) Problemas metabólicos.
-Es muy frecuente la presencia de diabetes en nuestros mayores producto de sobrepeso o del acúmulo de grasas en nuestro organismo. Bailar reduce las cifras de azúcar en sangre y reduce la necesidad de tomar medicación ya sea oral o mediante las dosis de insulina e incluso hace que los tejidos sean más sensibles a la insulina, provocando que los niveles de azúcar en sangre, bajen.
-Regula los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, rebajando así el riesgo asociado de sufrir un ictus o un infarto de miocardio. El sobrepeso es un estado anormal, un trastorno metabólico del organismo caracterizado por la acumulación excesiva de tejido adiposo. Constituye así, una enfermedad crónica originada por diversas causas y múltiples complicaciones a nivel cardiovascular, respiratorio, endocrino, neuromuscular, óseo y psicológico.
El concepto de si una persona está excedida de peso, varía con la raza, sexo, edad, época y el lugar. En términos generales es más frecuente en las mujeres y después de los 35 años (aunque puede darse a cualquier edad). Para que se acumule grasa en el organismo, es necesario que el número de calorías ingeridas sea mayor que el de las gastadas (balance positivo de energía). El gasto de calorías va a depender de la actividad que va a desarrollar cada persona: Aquí se recogen algunos ejemplos:
–Limpiar los cristales de casa supone una gasto de 280 calorías.
–Fregar el suelo o trabajar en el jardín o en un pequeño huerto: 640 calorías.
–Caminar a ritmo moderado durante 1 hora: 320 calorías.
El organismo aumentará de peso por recibir y asimilar exceso de alimentación, o por gastar poco de lo asimilado. Esto se deberá a factores causales exógenos (alimentación excesiva e inactividad) y también puede deberse a factores endógenos (glandular y endocrino) aunque estos últimos no son los más frecuentes.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el sobrepeso como un IMC (índice de masa corporal) igual o superior a 25, y la obesidad como un IMC igual o superior a 30. El índice de masa corporal es la relación que hay entre el peso y la talla. Los últimos cálculos de la OMS indican que en 2005 había en todo el mundo:
- Aproximadamente 1600 millones de adultos (mayores de 15 años) con sobrepeso.
- Al menos 400 millones de adultos obesos.
c) Huesos y articulaciones:
-Si bailamos, nuestros huesos y articulaciones serán más fuertes, mejorará la calidad ósea y la resistencia muscular. Reduce la posibilidad de caídas al mejorar la coordinación y la capacidad de reaccionar.
El riesgo de sufrir una fractura por fragilidad, es decir, la que se produce porque la calidad del hueso sea pobre y éste se rompa ante un traumatismo pequeño o mínimo. La osteoporosis es aquella enfermedad que afecta a los huesos y que se caracteriza por una baja masa ósea con el consiguiente aumento de la fragilidad del hueso y por lo tanto, el aumento en la producción de fracturas.
Es la enfermedad ósea más frecuente y el segundo problema en importancia en el campo de la salud tras las enfermedades cardiovasculares.
Se estima que una de tres mujeres y uno de doce hombres de más de 50 años tienen osteoporosis. En España se fracturan la cadera cada año 80.000 personas. Pero eso no es todo, 720.000 personas se rompen alguna vértebra y 200000 se rompen la muñeca anualmente.
En nuestro país, la prevalencia de la osteoporosis llega al 6.5% de la población, o lo que es lo mismo, 2.5 millones de personas. Con estas cifras, en Europa, cada 30 segundos se produce una fractura por osteoporosis. El número de éstas ha aumentado de forma exponencial en los últimos años.
En España, el tratamiento de un paciente con fractura de caderapuede llegar a los 100.000 euros entre el tiempo de ingreso, la intervención, medicación y rehabilitación. Pero, lo más descorazonador de todo es que sólo el 10% de los pacientes con la enfermedad reciben tratamiento.
En muchos casos, el paciente es diagnosticado cuando se le ha producido alguna fractura. Por comunidades, la tasa de incidencia más alta de fractura de cadera, ajustada para ambos sexos y por 100.000 habitantes, se sitúa en Cataluña, seguida de La Rioja, Andalucía, Aragón, Valencia, Castilla-La Mancha y Navarra, en orden decreciente.
d) Otros beneficios de bailar:
-Mejora la calidad del sueño.
-Mejora los hábitos posturales. Mejora el tránsito intestinal, reduciendo la posibilidad de sufrir estreñimiento.
-A nivel emocional, bailar se asemeja a correr. Reduce la ansiedady mejora el estado de ánimo al liberarse sustancias cerebrales como serotonina o dopamina que son las que mejorar nuestro estado de ánimo.
Bailar se ha convertido en la nueva actividad física de moda. Mejora el cuerpo y la mente. Si decide imitar a Travolta o a Jennifer López, no se arrepentirá.