La técnica consiste en introducir una lente ý un instrumental de trabajo dentro de la articulación de la rodilla a través de 2 pequeños orificios a ambos lados de la rótula. El interior de la articulación queda proyectado en una pantalla. La anestesia suele ser raquídea (de cintura para abajo). Dependiendo del tipo de lesión se alarga o se acorta el tiempo de cirugía que por término medio suele ser de 1 hora.

Artroscopia de rodilla

Cirugía del Ligamento Cruzado Anterior (LCA)

El ligamento cruzado anterior es el principal estabilizador que evita el desplazamiento anterior de la tibia con relación al fémur. El LCA es el ligamento intraarticular que con mayor frecuencia se lesiona llegando a ser 30 veces más frecuente que la lesión del cruzado posterior. Es la causa más frecuente de hemartros (sangre dentro de la articulación) en el trauma agudo.

El mecanismo de la lesión puede variar. Se puede presentar ante una hiperextensión forzada como la realizada por un jugador de fútbol al dar una patada “en falso” o durante una desaceleración brusca con el pie firme en el piso o al ser derribado el jugador por un golpe desde la parte posterior de la pierna.

Clínicamente se observa un paciente con una hemartros (derrame articular el cual apareció en un periodo de tiempo corto generalmente menor a 2 horas), dolor e impotencia funcional, sensación de inestabilidad con dificultad para la marcha.Durante el interrogatorio el paciente puede relatar haber sentido o escuchado cuando el ligamento se reventó.

Es importante precisar si el paciente pudo o no continuar con la actividad que desarrollaba durante la lesión y la forma en la cual salió del sitio de la lesión (caminando o cargado) ya que esto nos orienta a evaluar la severidad de la misma.

Los pacientes con lesiones agudas del LCA generalmente suspenden de inmediato la actividad y requieren ayuda para poder desplazarse del sitio de la lesión. El examen físico inicial generalmente se dificulta por dos factores; el dolor y el hemartros.

Ligamento cruzado anterior sano Ligamento cruzado anterior roto

LCA sano y LCA roto

El dolor del paciente no permite que se realice un examen adecuado de la estabilidad de la rodilla ni realizar maniobras para diagnosticar lesiones asociadas principalmente de los meniscos. A continuación se procederá a colocar una férula posterior o un vendaje elástico según haya lesiones asociadas o no dentro de la rodilla.

¿Quién debe operarse del LCA?

Todo aquel paciente que por motivos profesionales o recreativos necesite realizar movimientos de giro de la rodilla. Es muy recomendable en pacientes menores de 40 años. Aquellos pacientes que además de la lesión del LCA presenten una lesión de los meniscos (50% de las lesiones del LCA se acompañan de rupturas de los meniscos) pueden someterse a cirugía para arreglar solamente los meniscos o para tratar el LCA y los meniscos.

¿En qué consiste la cirugía de reconstrucción del LCA?

Desafortunadamente por las características propias del ligamento y a las fuerzas a las que se encuentra sometido, el LCA generalmente no cicatriza adecuadamente. En la mayoría de las veces una vez roto, aún con reposo y fisioterapia, no cura adecuadamente por si solo. Por estas mismas razones el tratamiento quirúrgico mediante simples suturas tampoco funciona. Se suele utilizar un injerto para sustituir al LCA roto. Éste puede ser de varios tipos:

  • Tendón rotuliano (HTH).
  • Tendones de la corva (Semitendinoso y recto interno).
  •  Injerto de cadáver (tendón patelar, tendón cuadricipital, etc.)

El procedimiento se lleva a cabo con asistencia artroscópica, esto quiere decir que se hace una incisión de aproximadamente 3-4 cm. para tomar el injerto y el resto de la cirugía se realiza con ayuda del artroscopio a través de dos a tres pequeñas incisiones de un centímetro de longitud. Con el artroscopio se revisa el interior de la rodilla. Si se encuentra una ruptura de los meniscos, se tratan de reparar.

En ocasiones es imposible reparar los meniscos debido a que se encuentran muy dañados. En éstos casos se realiza una menisectomía parcial, es decir se corta y se extrae solo la parte rota del menisco. Los muñones del LCA roto se limpian con un sinoviotomo hasta encontrar sus orígenes en el fémur y en la tibia.

Con guías y brocas especiales se perforan dos túneles, uno en la tibia y otro en el fémur, el injerto se pasa a través de estos túneles y se fija con tornillos o con otros dispositivos especiales. Los materiales para la fijación de los injertos pueden ser de dos tipos, metálicos o bioabsorbibles. Yo recomiendo los bioabsorbibles.

La rehabilitación comienza inmediatamente después de la cirugía, ya que desde que el paciente sale del quirófano comenzamos con ejercicios activos y pasivos para evitar perder musculatura y recuperar el rango de movilidad lo antes posible. Se permite el apoyo parcial de la pierna operada desde el primer día posterior a la cirugía. El protocolo de fisioterapia se inicia durante la primera semana y puede durar hasta seis meses.

¿Cuándo puedo volver a jugar?

El tiempo promedio es de 4 a 6 meses.

¿Cuándo puedo regresar a mi trabajo?

Si es trabajo de oficina, generalmente entre 7 y 10 días después de la cirugía. Si es trabajo físico, una vez que se recupere la fuerza en la pierna operada.

¿Cuándo puedo conducir?

Una vez que se tenga la movilidad completa y no dolorosa de la rodilla

Cirugía del Ligamento Cruzado Posterior (LCP)

Limitador de la translación tibial posterior y se le denomina, el estabilizador primario de la rodilla. También provee una restricción de la rotación externa tibial y conjuntamente, con el Ligamento Cruzado Anterior, son restrictores secundarios contra las fuerzas biomecánicas de stress, en varo y en valgo en la rodilla. Una lesión de ligamento cruzado posterior es una rotura parcial o total del LCP ubicado en la parte trasera de la rodilla. Este ligamento une a la tibia con el fémur.

Mecanismo lesional

La lesión de LCP es frecuentemente causada por un golpe fuerte en la parte de la tibia que está inmediatamente debajo la rodilla. Esto usualmente sucede cuando la rodilla doblada se choca contra el salpicadero en un accidente de tráfico. En los atletas, las rupturas del LCP son frecuentemente causadas al caer sobre la rodilla doblada y con la punta del pie apuntando hacia abajo.

Cuando el LCP sufre una lesión, otros ligamentos u otras partes de la rodilla también pueden resultar lesionados.

Clínica

Si el LCP sufre una lesión la rodilla puede presentar un hinchazón o dolor súbito en la parte posterior. Al pasar el tiempo, su rodilla afectada puede volverse inestable, especialmente durante el ejercicio.

En la exploración se aprecian signos de inestabilidad sobre todo al empujar la tibia hacia atrás, lo que se llama cajón posterior. Es conveniente realizar una RMN de la rodilla para valorar el alcance de la lesión del LCP y/o de estructuras vecinas como los meniscos o el LCA.

Tratamiento

El tratamiento en la mayoría de los casos es conservador. Se pautan antiinflamatorios, frío local, reposo y apoyo con 2 muletas. Las roturas aisladas del LCP se suelen intervenir únicamente en deportistas de muy alto nivel o en casos de inestabilidad. Siempre está indicada la cirugía si hay lesiones asociadas como la del LCA.

Artroscopia de rodilla    Tornillos de fijación

Se suele realizar una plastia ya sea a base de parte del tendón rotuliano del paciente o mediante aloinjerto. Se realiza mediante artroscopia de rodilla.

Cirugía de los meniscos

El menisco es un estructura situado en el interior de la articulación de la rodilla con forma semilunar y su principal función es aumentar la profundidad de la superficie relativamente plana de la parte superior de la tibia.

El menisco distribuye las fuerzas transmitidas a través de la rodilla: soporta alrededor del 40% de la carga que recibe la articulación. Además interviene en la estabilidad a la rodilla. El tercio externo o periférico, está vascularizado e inervado, por tanto presenta cierto potencial de cicatrización. Esta parte es la que tiene mayor importancia desde el punto de vista mecánico.

El resto del menisco (2/3 internos), es aneural y avascular, con débil o nula capacidad de cicatrización.

Mecanismo de lesión

Las lesiones meniscales pueden afectar a cualquier edad, pero las causas son algo diferentes en los distintos grupos de edad.

En los pacientes más jóvenes, el menisco es una estructura bastante resistente y elástica. Las roturas del menisco en pacientes menores de 30 años generalmente son el resultado de una lesión importante por torsión de la rodilla. Con frecuencia están relacionadas con alguna actividad deportiva.

En las personas mayores, el menisco se vuelve más débil con los años. El tejido meniscal degenera y se vuelve menos resistente. Las roturas meniscales a estas edades pueden deberse a un traumatismo menor (por ejemplo, al levantarse de la posición de cuclillas). Las roturas degenerativas del menisco se ven con frecuencia como una parte integrante de la artrosis de rodilla en la población de más edad. En muchos casos, no se recuerda un traumatismo específico que haya roto el menisco.

Hay dos formas principales de lesión: Traumatismo AGUDO de intensidad suficiente sobre un menisco sano. Traumatismos REPETIDOS sobre un menisco patológico afectado por una degeneración progresiva. Ante un traumatismo leve sobre un menisco degenerado se produce la rotura.

Clínica

El problema más frecuente que aparece con un menisco roto es el dolor. Este dolor puede percibirse en la línea articular (donde se sitúa el menisco) o puede ser más difuso y apreciarse en toda la rodilla.

Si la parte rota del menisco es lo bastante grande, puede producir un bloqueo: esto es la incapacidad de extender la rodilla por completo. El bloqueo ocurre cuando el fragmento roto del menisco resulta atrapado dentro del mecanismo de bisagra de la rodilla impidiendo la extensión total (imagínese introducir un lápiz en la bisagra de una puerta e intentar cerrarla). También hay consecuencias a largo plazo de una rotura meniscal.

El roce continuo del menisco roto sobre el cartílago articular puede causar el desgaste y fragmentación de esta superficie, conduciendo a la degeneración de la articulación. La rodilla puede inflamarse con el uso y volverse rígida y tensa. Esto se debe a la acumulación de líquido sinovial dentro de la rodilla.

Rotura menisco

Rotura longitudinal del menisco interno

Tratamiento

Tras la realización de una RMN donde se confirme la sospecha, el tratamiento suele ser quirúrgico mediante artroscopia de rodilla. Se la rotura es en una zona no reparable se resecará el fragmento.

Rotura meniscal

Rotura meniscal y resección al no ser reparable

Si la rotura se encuentra en una zona suturable, se realiza una sutura en lugar de resecar el fragmento roto

Sutura meniscoSutura menisco

Sutura meniscal