- La metatarsalgia es una de las dolencias más frecuentes en las consultas de Traumatología, ya que produce un dolor invalidante.
El dolor de pies es una de las causas más invalidantes y limitantes de entre todas las que llegan a la consulta. Son muy frecuentes, sobre todo entre las mujeres, y con frecuencia, es necesario recurrir a la cirugía para poder corregir dichas deformidades. Fíjense si es frecuente, que no se libran ni los miembros de las casas reales.
Recientemente se ha sabido que Doña Letizia lleva años sufriendo en silencio un tipo de dolor de pie realmente invalidante. Se llama metatarsalgia.
La metatarsalgia
Es una de las causas más frecuentes de consulta por dolor en Traumatología.
Es la presencia de dolor con el apoyo y al caminar en la zona correspondiente a la cabeza de los metatarsianos del pie, justo en la raíz de los dedos, sobre todo los centrales, desde 2º a 4º. La persona que lo padece sufre al permanecer de pie mucho rato (es realmente invalidante para los que trabajan de pie, de plantón como yo digo).
Es muy habitual que para aliviar el dolor, se tengan que quitar el calzado, masajearse los pies intentando calmar la zona irritada para volver a calzarse de nuevo.
En el caso de nuestra reina, han podido ser muchas las razones para que aparezca dicha dolencia:
-Suele asociarse con frecuencia a los pies con juanetes, donde el dedo gordo transfiere todo el peso que debe soportar al resto de los dedos; esto de forma repetida, sobre todo en personas que trabajan de pie, puede provocar la aparición de las “durezas” en la planta del pie y, mas adelante, del dolor y la cojera. Sin embargo, he realizado una búsqueda en internet de alguna imagen de los pies de Dña. Letizia. El 99% de las fotos son posando contacones de vértigo, a cuál más alto y más estrecho. Pero he podido ver un par de instantáneas donde se puede apreciar la imagen de sus pies, esta vez en sandalias.
Los pies de Dña. Letizia son unos pies bastante normales.
¿Qué quiero decir con eso como traumatólogo? Pues que no se evidencian grandes deformidades. Posee lo que denominamos un “pie cuadrado”. Es un tipo de pie en el que no hay juanete (descartada la primera causa) pero que los dedos siguen un orden como el que sigue: el dedo gordo es el más largo, luego viene el segundo dedo que es más corto que el primero pero más largo que el tercero; lo mismo ocurre con el tercero que es más corto que el segundo pero más largo que el cuarto.
Están colocados en orden descendente. Hay otro tipo de pie, llamado pie griego en el que el segundo dedo es el más largo, incluso que el primero, haciendo que en ocasiones, llegue a chocar con la parte de delante del zapato, obligando a encogerse debido a los golpes continuos y provocando un dedo martillo.Pues bien, Dña. Letizia tiene un pie cuadrado con un juanete mini, muy pequeño.
–Sobrepeso. Es otra de las causas. Cuanto más peso deban soportar las articulaciones, más sobrecargadas están y es más posible la presencia de dolor en los dedos centrales del pie. Como todo el mundo sabe, la Reina de España está delgada como un lápiz, luego descartamos esta segunda causa.
–Tacones. Esa sí es la verdadera razón del dolor de pies de Dña. Letizia. Debido a los millones de compromisos y eventos a los que tiene que asistir, el uso del tacón es casi obligado. Y no cualquier tacón diría, sino el de muchos centímetros. El tacón en sí provoca una sobrecarga de las cabezas de los metatarsianos. Es como ir de puntillas durante horas. El peso no se reparte de forma equilibrada entre los 5 dedos del pie, sino que son el 2º, 3º y 4º los que se sobrecargan más, y provocan el dolor.
Es frecuente que aparezcan durezas similares a callos en dicha localización, que vuelven a salir por muchas veces que se acuda al podólogo. Con frecuencia el paciente puede notar hasta sensación de hormigueo que le irradia a los dedos de los pies.
¿Cómo se trata la metatarsalgia?
El tratamiento inicial consiste en prescribir el uso de plantillas para “descargar” la parte de delante del pie, es decir, que la zona donde se encuentra la dureza en la planta del pie no apoye y se transfiera la carga del peso del cuerpo a una parte más atrás en el pie.
Además de intentar reducir las horas que se pasan encima de los tacones de vértigo. Se puede usar un tacón más discreto y de menor altura e incluso un calzado de plataforma.
Una segunda opción si esto no funciona, consiste en infiltrar las articulaciones del pie, las que unen los metatarsos con los dedos. El objeto es reducir la inflamación y el dolor.
Pero este remedio será temporal si volvemos a las andadas con el tacón, o no reducimos el peso en el caso que haya sobrepeso.
Cuando esto no es suficiente, se puede plantear la cirugía. Si es el juanete el que provoca dicha sobrecarga, hay que tratarlo a la vez que se tratan los dedos que provocan el dolor. El procedimiento suele ser realizar un corte en el hueso de los dedos centrales del pie para acortarlos. En este caso, convertir un pie griego (segundo dedo más largo), en un pie cuadrado (primer dedo más largo).
La cirugía debe ser el último recurso. Lo normal es que la molestia ceda con algunos de los tratamientos anteriores, aunque suele dar buen resultado.